Pues como ya les había comentado, conseguí boletos para el juego de México, así que el sábado me lance con unos amigos y con mi novia.
Según nosotros bien hábiles nos íbamos a ir MUY temprano, llegaríamos a muy buena hora y antes de entrar al estadio nos íbamos a chingar unos ricos tacos de estadio. Además yo iba a aprovechar pa´ buscar al campeón que vendía playeras y pues chance y me topaba con la del brody.
Nos quedamos de ver a las dos de la tarde y por diferentes circunstancias emprendimos el viaje a las 2:30. Había un pinche tráfico de la shit, llegamos al estadio como al diez para las cuatro, así que ya ni chance hubo de tacos, ni de playeras, ni de ni madres.
Luego luego entramos, pues teníamos que aprovechar que no había fila para entrar.
Tuvimos que rodear todo el estadio y en la caminata que me encuentro a la persona que más odio en este mundo, al perro Bermúdez. Muchas veces había planeado en mi cabeza que el día que lo viera le iba a dar un mape, pero al verlo no supe que hacer. El wey es re mamon.
El partido estuvo bueno, pero solo por momentos, la verdad la segunda parte estuvo bien aburrida. Pero el desmadre en el estadio se pone bien bueno. A la menor provocación había que gritarle culero al árbitro. El cielito lindo coreado por 120 mil personas es algo bien chido, pero lo que no tuvo madre fue la manera en la que la gente pedía al Cuau. La verdad no me imagino que se ha de sentir que 120 mil cabrones griten tu nombre. Por otro lado que habrá sentido el portero de Jamaica, ya que, cada que despejaba, 120 mil cabrones le gritaban puto. Y tampoco me imagino que ha de sentir la jefecita santa del árbitro después de que 120 mil cabrones le estaban miente y miente la madre cada que marcaba algo en contra de México.
La verdad yo soy de los de la idea de que no se salgan del Azteca, pinche estadio si pesa, pero bueno, los directivos ya tomaron la decisión y pues nosotros nos chingamos.
Lo feo fue el regreso, hicimos tres horas, aparte llovió bien duro y yo venia todo mojado y por si fuera poco, mi vejiga pequeña iba bien llena y no había donde pararnos pa´que me aventara una firma. Pero llegamos sanos y salvos.
Espero un poco más de la selección, espero un poco más de la delantera y difiero un poco del comentario del buen Sánchez Villa, yo a la defensa la vi chida.
Saludos y espero que hayan disfrutado el juego. El miércoles vamos por los pinches canadienses y seguramente lo veré en Chillis acompañado de la banda y de mi novia hermosa.